la suerte está echada (I)

A veces la vida es así. Naces… Y está genial, pero naces siendo qué? dónde? para qué? Y… Luego qué?

A mi me parece estupendo, porque sea como sea, me gusta vivir. Claro está que un humano o un animal, se mueve, tiene cierta opción. Limitada según el «dónde» y el «para qué», pero siempre con la opción de la movilidad.
Sin embargo los árboles nacen y… ESTÁN! Y VIVEN! o no… depende del dónde. La verdad es que su existencia no deja de tener un punto de injusticia. Grandes pilares del desarrollo de la vida, de su ecosistema, y con una suerte tan limitada y a veces ingrata. Pueden ser quemados, talados, o morir de sed… Sin nada que hacer. Solo aceptar, y vivir hasta que … «el cuerpo aguante».

soledad NuriaBlancoArenas©Namib

Me gustan los árboles. Su esencia es increíble. Son verdaderos titanes de la supervivencia, de la abstinencia, y mucho más. Si pensáramos en ello veríamos que su generosidad, su fortaleza, su aportación es tal que sin ellos, muy mal nos iría… Sin embargo, solo nos acordamos de Ellos si buscamos una sombra, si queremos fruta, o si encajan en una bella fotografía. Ahhh!…. Claro! Y si necesitamos leña o madera. Aish!!! Como es la fauna humana… Tan ingrata como a su vez todo lo contrario.
Yo espero que el lado bueno, gane… Y que la fuerza que nos mantiene vivos sea tan generosa con Ellos como Ellos lo son con nosotros.
Cuando fotografié esta escena pensaba… -«Caramba!… Dos nacieron juntos, pueden acariciarse en noches de brisa, pueden compartir visitantes, y… aunque también deban repartir la escasez de agua de su extremo suelo, viven acompañados…  Se dice que el sonido del silencio es poderoso… Quizás sea un lenguaje conocido por Ellos que haga de su existencia un diálogo o debate de lo más importante… Pero y el que nace apartado… Sin opción. Una vida dedicada al recogimiento, anacoreta sin opción, sin queja, con aceptación.
Así … Esas tres acacias nacieron, y viven. Dos unidas en la fortuna, y una al margen, esperando a ese «principito» que la mire, la admire, la ame…
Porque aunque no sea una rosa, también es bella, misteriosa, valiente…

continuará…

Esta entrada fue publicada en fotos y momentos, reflexiones. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *